“American
Horror Story” es una de series con
mejores críticas de los últimos tiempos, por ser cómoda de ver, diferente al
resto de ficciones y renovarse en cada temporada.
Esta
serie con temática de terror engancha por los misterios que va desarrollando en
cada tanda de episodios. La primera se centró en la casa del crimen, la segunda
en un manicomio, la tercera en un aquelarre de brujas y la nueva está centrada
en el circo de los horrores. Eso es lo que más nos gusta a sus seguidores, que
las temporadas sean autoconclusivas; que presenten una historia con numerosos
giros argumentales y un final cerrado, sin alargar la trama más de la cuenta.
Otro
de los puntos fuertes son sus actores. En cada una de las historias interpretan
a personajes distintos y la protagonista Jessica Lange clava cada uno de ellos
de una forma magistral. También hay que hacer una mención especial a las
interpretaciones de Sarah Paulson, Lily Rabe, Zachary Quinto y Evan Peters; o
las brillantes incorporaciones de Angela Basset y Kathy Bates en su tercera
tanda.
Otra
gran baza es el apartado técnico y artístico. La ambientación está muy cuidada,
la fotografía es excelente y hay grandes planos y secuencias que se quedan
grabados en la retina.
La
cuarta temporada ha comenzado con Elsa Mars, una excabaretera alemana que
regenta un circo y que acude a un centro de salud para visitar a unas gemelas
siamesas que han sido acusadas de asesinar a su madre. Elsa ve en Bette y Dot
la oportunidad de atraer al público a su espectáculo de horrores de la
naturaleza. Con
su llegada al circo, vamos conociendo al resto de personajes. Jimmy, un
adolescente con una deformidad en las manos de la que parece sentirse
orgulloso; su madre la mujer barbuda; la mujer más pequeña del mundo... Y
también aparece el terrorífico payaso Twisty cometiendo asesinatos y secuestros
en la ciudad de Jupiter.
Este
inicio de temporada ha superado las expectativas que depositaba en ella después
del pequeño bajón de la anterior. Me ha encantado la tranquilidad con la que
han introducido los distintos personajes y como han mostrado las diferentes
personalidades de las siamesas. Sarah Paulson está soberbia en ese papel y los
efectos en sus cabezas están muy bien trabajados. Además, la realización, el
juego de la pantalla dividida y la elaboración de los planos con respecto a las
visiones de ambas cabezas han sido de lo mejor del capítulo.
Además
de los correctísimos efectos visuales, la banda sonora que ha acompañado a los
personajes durante todo el capitulo ha sido fastuosa, recreando un ambiente
terrorífico en cada una de las apariciones del payaso Twisty, que por cierto,
no lo podían haber caracterizado mejor. Todavía nos queda saber como avanzaran
las tramas de este circo y descubrir al resto de personajes de este circo de
los horrores como la mujer con tres pechos, el hombre forzudo o a la adivina de
la bola de cristal.
No
puedo acabar esta entrada sin mencionar la destacable participación de personas
cuyas deformidades son reales: la mujer más pequeña del mundo con una estatura
de 62,8cm y cinco kilos de peso; el hombre sin piernas que en la realidad
padece la enfermedad de agenesia del sacro; o el hombre que padece focomelia al
parecerse sus extremidades a las aletas de foca.
Este
ha sido un gran comienzo para una prometedora historia que esperemos que esté
llena de giros y de sorpresas como las del final de este capitulo, con esa
revelación totalmente inesperada. Larga vida a American Horror Story.
No hay comentarios:
Publicar un comentario