Muchas eran las críticas que recibía Disney por sus nuevas películas: más de lo mismo, secuelas sin sentido, etc. Parece que Disney se ha puesto las pilas estos últimos años y ahora nos está regalando auténticas joyas animadas. Estas nuevas películas están convenciendo tanto al público como a la crítica. La magia de la factoría ha vuelto, por lo que podemos hablar de una nueva edad de oro.
Evidentemente, no hay luz sin oscuridad. Y para que haya una edad de oro, se debe atravesar un tiempo no tan bueno. La primera edad de oro de Disney comenzó con "Blancanieves", "Dumbo" o "Bambi", presentando películas animadas como nunca se habían visto antes. En los años cincuenta llegaron filmes como "Peter Pan" o "Alicia en el país de la maravillas", cosechando nuevos éxitos. El primer declive surge en los 80, con películas mucho más oscuras como "Tod y Toby" o "Taron y el caldero mágico". En los años 90 "La Sirenita" hace que Disney comience una nueva edad de oro, que se completa con otras cintas clásicas como "Aladdín", "El rey león" y "Pocahontas". Más adelante, "El jorobado de Notre Dame" o "Tarzán" dejan fríos al público. Muchos consideran a Pixar el culpable de ese declive de Disney. "Toy story" o "Bichos" recaudaron más que los últimos estrenos de Disney; y Dreamworks también le va quitando mercado con "El Principe de Egipto" y sus posteriores cintas.
Disney volvió a ser lo que era con películas como "Tiana y el sapo" y "Enredados", pero no ha sido hasta el estreno de sus últimas tres grandes películas ("Rompe Ralph", "Frozen" y "Big Hero 6") cuando la franquicia se ha vuelto a situar en la posición que estaba años atrás, viviendo una nueva edad de oro. Y creo que el éxito se debe al esquema rompedor que representan, situando a los malos como protagonistas, acabando con la idea de amor verdadero y presentando guiones tiernos y emocionantes.
Evidentemente, no hay luz sin oscuridad. Y para que haya una edad de oro, se debe atravesar un tiempo no tan bueno. La primera edad de oro de Disney comenzó con "Blancanieves", "Dumbo" o "Bambi", presentando películas animadas como nunca se habían visto antes. En los años cincuenta llegaron filmes como "Peter Pan" o "Alicia en el país de la maravillas", cosechando nuevos éxitos. El primer declive surge en los 80, con películas mucho más oscuras como "Tod y Toby" o "Taron y el caldero mágico". En los años 90 "La Sirenita" hace que Disney comience una nueva edad de oro, que se completa con otras cintas clásicas como "Aladdín", "El rey león" y "Pocahontas". Más adelante, "El jorobado de Notre Dame" o "Tarzán" dejan fríos al público. Muchos consideran a Pixar el culpable de ese declive de Disney. "Toy story" o "Bichos" recaudaron más que los últimos estrenos de Disney; y Dreamworks también le va quitando mercado con "El Principe de Egipto" y sus posteriores cintas.
Disney volvió a ser lo que era con películas como "Tiana y el sapo" y "Enredados", pero no ha sido hasta el estreno de sus últimas tres grandes películas ("Rompe Ralph", "Frozen" y "Big Hero 6") cuando la franquicia se ha vuelto a situar en la posición que estaba años atrás, viviendo una nueva edad de oro. Y creo que el éxito se debe al esquema rompedor que representan, situando a los malos como protagonistas, acabando con la idea de amor verdadero y presentando guiones tiernos y emocionantes.
ROMPE RALPH. En esta cinta nos encontramos muchos cambios con respecto a lo que nos tenía acostumbrados Disney: un villano es el protagonista, los famosos reinos mágicos son sustituidos por máquinas recreativas y las mujeres son corredoras de carreras o sargentos y no princesas por nacimiento. La historia que muestra es totalmente original y creativa, presentando un conflicto basado en la aceptación de uno mismo. Me llama mucho la atención la inteligente forma que tienen de relacionar los diferentes juegos y como el filme es capaz de despertar la nostalgia. Los constantes giros de guion te enganchan a una aventura que sorprende en su recta final. Es muy fácil empatizar con los personajes y Vanellope se hace con un hueco de nuestro corazón. Es un gran entretenimiento para todas las edades con buenas escenas de acción y otras que pueden hacer que te caigan las lágrimas.
FROZEN: El musical basado en la historia de la Reina de las Nieves se ha convertido en la película de animación más taquillera de la historia, llegando a ganar el Oscar. Una excepcional narración, una notable banda sonora, unos efectos extraordinarios y unos personajes realmente maravillosos son los que han colocado a "Frozen" como la mejor película de Disney en mucho tiempo. El romper con la idea de que el príncipe es el amor verdadero, conviertiéndolo en el máximo villano en la recta final es uno de los giros más sorprendentes de la cinta. Además, Disney vuelve a utilizar con acierto la idea de un personaje secundario que aporte el lado cómico: Olaf, el tierno muñeco de nieve que se ha convertido en la marca de la película junto a sus dos protagonistas femeninas.
BIG HERO 6: La historia que cuenta es realmente buena, metiéndose en el mundo de la robótica pero sin llegar a ser pesada y gustando a todo el mundo. De la cinta se extraen auténticas lecciones de vida que hacen madurar a cualquiera, pues la triste historia que se narra se presenta como un gran entretenimiento emocional que nos hace reflexionar. La calidad visual y la animación es espectacular. Y que decir de la ambientación; una ciudad futura en la que se fusiona la tecnología nipona con la armonía y el romanticismo de San Francisco, Oriente con Occidente: San Fransokyo. Los personajes también son de lo mejor, pero el más adorable es sin ninguna duda el robot Baymax, pues es quien nos hace reír, quien nos ofrece los momentos de ternura y quien nos emociona al final. A pesar de todo, la película es bastante predecible, pues al menos yo me olía el final y la identidad del villano desde el comienzo. Pero esto no le quita el mérito al maravilloso y buen desarrollo del filme.
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